Últimamente oimos hablar a menudo sobre «la nube» en informática, pero ¿Qué es exactamente? Hoy lo aclararemos en nuestro blog.

La nube es un lugar donde guardar tus archivos en Internet, junto a los programas necesarios para usarlos.

Estos archivos pueden ser fotos, hojas de cálculo, documentos de texto, fichas de clientes, presupuestos anuales de ventas, etc. Y está claro que los archivos por si sólos no son útiles, sino que necesitamos programas informáticos para manejarlos, como un visor de imágenes, un tratamiento de textos, un programa de facturación o contabilidad…

Esos programas pueden ser gratuitos o de pago. Y eso es lo que nos ofrece la nube, o “cloud computing” como se le llama en inglés, tanto el lugar para almacenar la información, como los programas para tratarla.

Lo interesante, cuando son de pago que se puede hacer como un alquiler mensual de servicios. Y pagar sólo por lo que realmente necesitas.

Veamos los tres tipos básicos de servicios en la nube.

ALMACENAMIENTO

Uno de los servicios que primero se ha popularizado es el almacenamiento. Programas como Dropbox, GoogleDrive, Skydrive o iCloud, facilitan tremendamente la operación de guardar nuestros archivos en Internet y compartir con quien queramos algunos de ellos.

Se podría decir que esto no es nada nuevo, puesto que Internet nació precisamente así, y sería cierto. Lo que sí es nuevo es la manera de hacerlo.

Todos estos servicios se basan en instalar en nuestro ordenador, teléfono inteligente o tableta, un programa que crea una carpeta nueva en nuestro dispositivo. Todo lo que copiemos en esa carpeta se actualiza inmediatamente en nuestra nube particular, y aparece mágicamente en todos los dispositivos que tengamos conectados a la nube.

Además, si no queremos o no podemos instalar ese programa, o estamos trabajando en un ordenador temporalmente en el que necesitamos acceder a nuestros archivos en la nube, siempre tendremos la opción de utilizar el navegador para “subir” o “bajar” la información.

SERVICIO DE TRATAMIENTO DE DATOS

Podemos incluir muchas utilidades, cada vez hay más. Para entenderlo pensemos en algo que ya usamos a diario: el correo electrónico. Hoy en día hay muchas personas que acceden a su cuenta de correo directamente en la web, y no sólo a nivel particular sino también al correo de empresa.

El correo web es un programa instalado en un ordenador servidor, que nos permite gestionar nuestro buzón directamente desde un navegador en cualquier otro ordenador. El buzón no es más que un almacén de archivos que se envían de un lado para otro.

Hacemos exactamente lo mismo cuando compramos unas entradas por Internet, o accedemos a nuestra cuenta bancaria, buscamos información en un buscador, usamos las redes sociales …

Están apareciendo programas específicos para cada una de las funciones que realizamos en el ordenador. Desde el tratamiento de imágenes, hasta la ofimática. Servicios como Google Docs y más recientemente Office 365, nos ofrecen casi las mismas funciones que los programas para el tratamiento de textos y hojas de cálculo que tenemos instalados en nuestro ordenador.

Por último ya es bastante natural que los empleados de la empresa utilicen programas para consultar datos de los clientes, entrar pedidos, consultar un extracto de ventas, o incluso facturar, directamente desde el ordenador de casa o desde el teléfono móvil.

A modo de ejemplo, nuestro programa para la gestión de despachos de abogados y otros profesionales, GESABO, permitirá en breve gestionar la agenda particular de cada profesional, directamente desde cualquier lugar. Y esto es sólo el principio, ya que progresivamente iremos añadiendo funciones en la web, para que el usuario de nuestro programa active y utilice las que desee.

SERVICIO DE VIRTUALIZACIÓN

Puesto que el espacio de almacenamiento en disco ya no es un problema. ¿Porqué no almacenar un ordenador completo en la nube? Más aún. ¿Porqué no almacenar TODOS los ordenadores de una empresa en la nube, incluso los servidores? Esto permitiría que cualquiera pueda acceder a “su ordenador” desde cualquier otro, esté donde esté, también desde el teléfono inteligente. Esto no es magia, es el presente de la informática.

Es posible que ya hayas utilizado algún programas de “escritorio remoto” para acceder desde casa a tu ordenador de la empresa, como si estuvieras delante de tu pantalla. Es muy habitual, y si no lo has hecho nunca y tienes interés en hacerlo, habla con tu informático para que te lo configure. En ProdeX estaremos encantados de asesorarte con este tema.

Pues bien, no hay ninguna diferencia entre acceder a un ordenador de tu empresa por escritorio remoto, o acceder a un ordenador “virtual”. Ninguna. Al menos desde el punto de vista del acceso.

Por el lado del servidor la cosa cambia. En lugar de tener ocupado tu ordenador de la oficina mientras estás conectado/a, el ordenador virtual está “instalado” en un servidor muy potente junto a otros muchos ordenadores virtuales. Este servidor se encarga de repartir eficientemente los recursos informáticos como el procesador, la memoria, el disco, de manera que siempre tienes tu ordenador disponible.

En tu ordenador virtual puedes instalar cualquier programa, pero a menudo existe la posibilidad de solicitar un programa estándar de una lista de programas, y este aparece mágicamente sin hacer nada más. Bueno quizás tengas que pagar algo más al mes por usar ese nuevo programa.

VENTAJAS DE LA NUBE

– Puedes empezar a trabajar inmediatamente.
– Uso desde cualquier lugar. Tus datos están en Internet.
– Inversión mínima. Muchos servicios son gratuitos o de bajo coste.
– Escalabilidad. Puedes crecer en prestaciones si es necesario.
– Actualizaciones automáticas. Se encarga el proveedor del servicio.
– Copias de seguridad automáticas.

INCONVENIENTES-

– Necesitas acceso a Internet.
– La velocidad de acceso puede ser un problema.
– Dependencia del proveedor.
– Privacidad. Tus datos están en Internet.

Como el almacenamiento en disco se ha vuelto barato, han aparecido ofertas gratuitas para guardar tus datos en Internet, a cambio quizá de publicidad. También han aparecido nuevas maneras de utilizar el ordenador aunque sea para hacer las mismas cosas de siempre.

Podemos concluir que estas nuevas maneras pueden ser tanto o más seguras que las tradicionales, tienen sus ventajas y debemos aprovecharlas. Pero hay que tener precaución porque pueden crear una dependencia del proveedor del servicio, por lo que debemos de tener una buena confianza en él.
Deberíamos leer siempre la letra pequeña de la licencia de uso de cualquier programa en la nube, para asegurarnos que estamos conformes con el uso que van a dar a nuestros datos.

Quizá no sea mala idea hacer copia de nuestra nube, aquí en la tierra, vía USB, de vez en cuando.